15 Mar Trucos y consejos para hacer un buen maridaje

Los estilos de vino han evolucionado durante los últimos años. Por esta razón, a la hora de hablar de un buen maridaje no podemos recurrir a los tópicos del vino, blanco para el pescado y tinto para la carne. Existe una gran cantidad de sensaciones que podemos descubrir cuando experimentamos con los sabores. ¿Quieres saber cómo? Te lo contamos a continuación.

Reglas básicas de un buen maridaje

Valor y cabeza en la elección

Ha llegado el momento de desterrar la idea tradicional de maridar el pescado con vino blanco y la carne con tinto. A la hora de seleccionar un vino, hay que tener un poco de cabeza y un poco de valentía. Por una parte, debes tener en cuenta la intensidad aromática respecto al plato que acompaña. La potencia aromática y de sabores de dicho plato necesitará un vino equivalente. Por otro lado, necesitarás un poco de valentía para atreverte a experimentar con nuevos sabores y combinaciones. Y tú, ¿eres valiente y sensato?

Fuera los prejuicios

Aunque lo más habitual es maridar nuestras comidas con blancos o tintos, no debes olvidar que existe una amplia variedad de vinos rosados que combinan a la perfección con casi todo. Nuestra recomendación es servirlos siempre rondando los 12º C.

Sé ordenado

El orden en el que consumas los vinos puede influir significativamente en el resultado final. Lo más recomendable para un buen maridaje es comenzar por el más joven y terminar por el más viejo. Por lo tanto, el aperitivo deberás acompañarlo con un espumoso, seguido de un rosado. En tercer lugar debes continuar con un vino blanco, para finalizar con un tinto.

Vigila la temperatura

Para saborear un vino en su máximo esplendor, este debe estar a la temperatura adecuada. Lo mejor es seguir siempre la recomendación del elaborador que figura en la etiqueta. En líneas generales, la franja térmica se inicia en torno a los 8 o 9 grados para un blanco con poco cuerpo. Por su parte, el tinto, que se consume a una temperatura más elevada, debe servirse fresco para que vaya entonándose en la copa.

Usa la copa adecuada

Cada tipo de vino requiere de una copa específica, siendo la más pequeña la que le corresponde a los blancos. En cambio, para los vinos tintos, es recomendable tener dos clases de copas: borgoña y burdeos. No obstante, más importante que el tamaño del recipiente es el vidrio del que está hecho. Este debe ser de buena calidad y fino para poder saborear el vino con todos sus matices.