06 Sep El arte de la vendimia

La vendimia es una tradición milenaria con reconocimiento a nivel internacional. El término proviene del latín “vindemia“, compuesto por “vinea” (viña) y el verbo “demere” (arrancar) y remite a la acción de tomar el fruto de la viña. En este post te explicamos un poco más acerca de la vendimia, quédate y conoce algunos de los secretos de esta tradición.

En España el tiempo de la vendimia se da entre los meses de agosto hasta octubre, siempre va a depender del grado de maduración de las uvas y de otros factores como las condiciones climáticas que se den cada año; del tipo de uva; de la zona en donde se produzca; del tipo de vino y de las características que se quieran alcanzar o resaltar de cada uva en específico.

Vendimia manual frente a la vendimia mecánica

Según la forma en la que se recogen las uvas existen dos tipos diferentes: por un lado, la manual; y por el otro, la mecánica. Cada una se hace de una forma, pero el resultado final es el mismo, elaborar vino.

• La vendimia manual. Es la técnica más tradicional, se eligen uno a uno los mejores racimos, de esta forma se selecciona los más adecuados. Es un trabajo costoso a nivel físico y económico, ya que el tiempo de recolección es mayor, por lo que los costes, también lo son.
• La vendimia mecánica. Es un tipo de recogida que se suele utilizar en viñedos con gran extensión de terreno llano o en grandes parcelas con poco desnivel. La recolección se realiza mediante tractores que reciben el nombre de vendimiadoras y van recorriendo las líneas del viñedo mientras sacuden los pies de la cepa, produciendo una vibración que provoca la caída de los granos de la uva en su remolque.

Vendimia nocturna y vendimia diurna

En el arte de vendimiar, cada bodega decide de qué forma lleva a cabo su vendimia, ¡faltaría más! En muchas zonas lo más habitual es hacerlo de noche, por las ventajas que le proporcionan las temperaturas más bajas a las uvas. Las temperaturas altas pueden provocar que las uvas fermenten y recolectarlas por la noche favorece que lleguen intactas hasta las cámaras.

Además, es primordial que las uvas se recojan antes de que caiga el rocío sobre ellas, esto se hace para evitar que este agua cambie el sabor final de la uva. Otro punto clave de este proceso es que, una vez hecha la recolección, los racimos de uva deben pasar el menor tiempo posible fuera de la bodega.

Ahora que tienes claro algunos de los imprescindibles de la época de la vendimia, quizás te interese conocer este proceso más de cerca, si es así debes saber que muchas bodegas organizan jornadas para visitantes donde muestran el proceso en primera persona, ¿te animarías a asistir?